¿Miedo de la Navidad?
"No tengas temor de ir a Egipto, porque allí haré de ti una gran nación. Yo te acompañaré a Egipto, y yo mismo haré que vuelvas… " Génesis 46:2-4
Un hombre estuvo horas en la línea esperando para comprar el nuevo videojuego que iba a lanzarse al mercado. No dejó su lugar para comer o dormir, porque tenía miedo de no poder concretar su sueño.
A una mujer le ofrecieron un trabajo mejor, con más posibilidades de promoción, pero lo rechazó. "Más vale pájaro en mano que cien volando", dijo. Tenía miedo de dejar lo que tenía, por algo que no conocía.
"No tengas miedo de ir a Egipto", le dijo Dios a Jacob. Jacob podría haber tratado de aferrarse al pedacito pequeño de promesa de Dios que ya tenía pero, al dejarlo ir, Dios le dio más. Fueron a Egipto como una familia, y regresaron a Canaán como una nación.
Y usted, ¿tiene miedo de ir a otro lado? ¿Tiene miedo de desprenderse de alguna parte de un regalo que Dios le ha dado? A veces tenemos miedo de decir: "hágase tu voluntad", por temor a dónde podrá llevarnos la voluntad de Dios.
Pero la promesa de Adviento que Dios nos hace es segura. Al igual que como le dijo a Jacob, Dios irá con nosotros, aún si es lejos de donde nosotros queríamos estar. Y si nos lleva lejos, nos traerá de vuelta, más grandes que antes.
A través de la obediencia de Jacob, Dios nos dio la familia de nuestro Salvador. A través de la obediencia de José muchos siglos después, Dios nos trajo a Jesús.
ORACIÓN: Señor, no siempre quiero ir a donde tú quieres guiarme, pero sé que eres mi Pastor. Guíame hoy, para que pueda ver tu promesa mañana. Amén.
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