Crosswalk.com

Alimento Diario - 9 de Septiembre

  

Poco a poco

¿A dónde podría alejarme de tu Espíritu? ¿A dónde podría huir de tu presencia? Si subiera al cielo, allí estás tú; si tendiera mi lecho en el fondo del abismo, también estás allí. Si me elevara sobre las alas del alba, o me estableciera en los extremos del mar, aun allí tu mano me guiaría, ¡me sostendría tu mano derecha!  Salmo 139:7-10

Durante cuatro meses la familia de Jean la estuvo buscando. Fueron por todos lados: por el desierto y la ciudad, a caballo, a pie, y en vehículos todo terreno. Abrieron una página en Facebook, utilizaron helicópteros, pusieron avisos en las rutas y caminos, y hasta ofrecieron una recompensa de $10,000.

Finalmente, Jean ha sido hallada: su esposo encontró su cadáver en su propia casa. Lo descubrió al ver los pies que sobresalían por debajo de un montón de cosas acumuladas. Es que Jean era de esas personas que son adictas a comprar y guardar cosas, toda clase de cosas, y en gran cantidad.

Lo más importante de todo esto es que, aun cuando ni el esposo ni el resto de su familia tenía idea del paradero de Jean, Alguien sí sabía dónde estaba.

Lea una vez más el pasaje de más arriba. Claramente dice que no hay lugar donde un pecador pueda escapar de Dios. El Creador del universo sabe dónde nos encontramos… en todo momento.

Para el pecador no perdonado, el saber que Dios puede ver sus maldades es aterrorizante.

Para el pecador que ha sido lavado de sus transgresiones con la sangre del Salvador, el saber que Dios está con él le provee un consuelo inmenso.

Es mi esperanza y oración que usted sea parte de este segundo grupo. Oro para que el Señor le conozca como uno de sus hijos perdonados y salvados, y para que usted tenga a Jesucristo como su Salvador y Señor.

Si así lo hace… nada podrá jamás lastimarle, por la eternidad.

ORACIÓN: Señor Dios, como uno de tus hijos perdonados te doy gracias por tu presencia constante en mi vida, y porque sé que, sean cuales fueran las cosas que se interpongan en mi camino, Tú estarás siempre a mi lado. En el nombre de Jesús. Amén.

© Copyright 2011 Cristo Para Todas Las Naciones  

CRISTO PARA TODAS LAS NACIONES 
660 Mason Ridge Center Dr. 
St. Louis, MO 63021 
1-800-972-5442 
camino@lhm.org 
www.paraelcamino.com