Espectadores usuales
“... y aún los gobernantes estaban burlándose de él. –Salvó a otros—decían; que se salve a sí mismo, si es el Cristo de Dios, el Escogido.” Lucas 23:35
Los gobernantes que estaban en la crucifixión eran religiosos. Pero el ser religiosos no les hacía mucho bien. En general, quienes son religiosos, acostumbran decir que la religión ha producido un profundo cambio en sus vidas.
Hace un tiempo encontré a alguien que había experimentado una profunda conversión. Esta señora me dijo: “Pastor, estoy tan contenta de finalmente haber encontrado la religión—me ha cambiado la vida. ¿Sabe qué? Tengo un tío al que siempre odié tanto, que me había prometido que cuando muriera no iría a su sepelio. Pero desde que me hice religiosa cambié de forma de pensar, así es que con gusto iré a su funeral.”
Los gobernantes que crucificaron a Jesús estaban contentos de verlo morir. Demasiado habían esperado ese momento. En contraste con esa actitud, Jesús obedientemente vivió su vida y murió su muerte para conquistar la muerte por nosotros. Su resurrección hace posible que nosotros, sus seguidores, podamos burlarnos de la misma muerte. La tumba hace posible que quienes conocen a Cristo como Salvador, digan: “¿Dónde está, oh muerte, tu victoria? ¿Dónde está, oh muerte, tu aguijón?”.
ORACIÓN: Querido Señor, me arrepiento de mis pecados que te llevaron a la cruz. Permíteme compartir la confianza que tengo de que, porque tú vives, yo también viviré. Amén.
© Copyright 2011 Cristo Para Todas Las Naciones
CRISTO PARA TODAS LAS NACIONES
660 Mason Ridge Center Dr.
St. Louis, MO 63021
1-800-972-5442
camino@lhm.org
www.paraelcamino.com