No somos fieles
Todos se desviaron, a una se han corrompido. No hay quien haga lo bueno, ¡no hay ni siquiera uno! - Romanos 3:12
Dios es fiel. Estas tres palabras son suficientes para llenarnos de alegría, porque si Dios es fiel, quiere decir que podemos contar con él en todo momento y circunstancia. Porque Dios siempre cumplió, y sigue cumpliendo, sus promesas.
Lamentablemente, no podemos decir lo mismo de nosotros. Es difícil encontrar una persona con quien podemos contar en cualquier situación. Ni siquiera nosotros mismos conseguimos ser fieles todo el tiempo. Por ejemplo, prometemos que no vamos a hacer nada que vaya en contra de la ley de Dios, pero aún así tarde o temprano terminamos pecando.
Es por ello que necesitamos acercarnos cada vez más a él para que nos ayude a ser cada día más fieles. Por su parte, Dios prometió que todo aquel que confiese sus pecados y confíe en Jesucristo como su Salvador personal, tendrá vida eterna.
ORACIÓN: Misericordioso Dios, gracias por tu fidelidad. Te pido perdón por mis pecados y confío en ti para mi salvación y vida eterna. Amén.
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