Tema de la Semana: Los Fundamentos
A lo largo de esta semana analizaremos cada una de las partes que componen Primeros15, compartiendo qué es lo que Dios desea para cada una de ellas. En su mayoría Primeros15 está dedicado al encuentro con Dios y a aprender sobre su carácter, pero de vez en cuando veremos algunas enseñanzas y herramientas que nos ayudarán a buscar a Dios en una mayor profundidad. Esta semana volveremos a lo básico y aprenderemos algunas disciplinas espirituales que nos ayudarán a encontrarlo de maneras más profundas y transformadoras.
¿Qué es la Adoración?
Pasaje Bíblico: “Pero yo le cantaré a tu poder, y por la mañana alabaré tu amor…”. Salmo 59:16
Devocional
¿Qué es adorar a través de canciones? Cuando vamos a la iglesia o nos reunimos con otros creyentes, ¿por qué cantamos? Claramente, no todos encuentran en el canto o en la música su mayor pasión, entonces, ¿por qué lo hacemos?
La adoración es, ante todo y sobre todo, el anhelo de Dios de tener una relación sin trabas con su pueblo. En la adoración auténtica podemos tocar el corazón de nuestro Creador, satisfaciendo los deseos de quien pagó el precio más alto simplemente por tenernos. La Biblia es clara en cuanto a que Dios ama cuando le cantamos a él y cuando cantamos de él. Efesios 5: 18-19 nos dice: "… sean llenos del Espíritu. Anímense unos a otros con salmos, himnos y canciones espirituales. Canten y alaben al Señor con el corazón”. Juan 4:23 dice: “Pero se acerca la hora, y ha llegado ya, en que los verdaderos adoradores rendirán culto al Padre en espíritu y en verdad,[a] porque así quiere el Padre que sean los que le adoren”.
Dios ama la adoración. Él añora eso. ¡Piensa en eso! Tienes la oportunidad todos los días, a través de la adoración, de satisfacer el corazón de quien pinta puestas de sol, respira aliento de vida en el polvo y forma montañas, galaxias, animales, ángeles y humanidad solo con el poder de su voz. Tú le das a tu Creador una inmensa alegría y satisfacción cuando lo adoras cantando.
Ya ves, Dios busca tu corazón. Él busca la conexión directa de su Espíritu al tuyo. La música tiene esta profunda habilidad de llegar más allá de nuestra limitada comprensión y ayudar a nuestro corazón a conectarse con aquel que es ilimitado y eterno. Sirve como una avenida para este acto cíclico y recíproco de amor y de devoción entre el Creador y lo creado. En la adoración, descubrimos la realidad de Dios en un nivel diferente que cuando leemos la Biblia o cuando pasamos tiempo en oración o en comunidad. En la adoración podemos cantar a Dios cantos de adoración, acción de gracias, alabanza y amor puro en respuesta a su carácter, cercanía y devoción. En pocas palabras, en la adoración damos y recibimos lo que es más importante: el amor.
Ya sea que normalmente te dediques a la adoración personal o no, debes saber que fuiste creado para adorar. Fuiste hecho para conectarte directamente con el corazón de Dios. Al participar en el acto de adoración, descubrirás la cercanía de un Dios tan lleno de amor y devoción constantes hacia ti que hará que todo cambie. A medida que toques en forma continua el corazón del Padre, tu vida será transformada por su gracia ilimitada y su búsqueda apasionada. Participar en la adoración dará como resultado una alegría desbordante e inextinguible, ya que no hay una experiencia mayor que la de un encuentro perfecto de Dios con una persona imperfecta.
Tómate un tiempo para reflexionar con la guía de oración sobre la importancia de la adoración y de conectarse directamente con el corazón de tu Padre celestial. Que tu tiempo se caracterice por una mayor revelación de su cercanía y amor.
Guía de Oración:
1. Permite que la Biblia te llenen de un deseo de conectarte directamente con tu Creador a través de la adoración.
“Aclamen alegres al Señor, habitantes de toda la tierra; adoren al Señor con regocijo. Preséntense ante él con cánticos de júbilo. Reconozcan que el Señor es Dios; él nos hizo, y somos suyos. Somos su pueblo, ovejas de su prado. Entren por sus puertas con acción de gracias; vengan a sus atrios con himnos de alabanza; denle gracias, alaben su nombre”. Salmo 100:1-4
“Vengan, cantemos con júbilo al Señor; aclamemos a la roca de nuestra salvación. Lleguemos ante él con acción de gracias, aclamémoslo con cánticos. Porque el Señor es el gran Dios, el gran Rey sobre todos los dioses. En sus manos están los abismos de la tierra; suyas son las cumbres de los montes. Suyo es el mar, porque él lo hizo; con sus manos formó la tierra firme. Vengan, postrémonos reverentes, doblemos la rodilla ante el Señor nuestro Hacedor”. Salmo 95:1-6
"Tributen al Señor la gloria que merece su nombre; póstrense ante el Señor en su santuario majestuoso”. Salmo 29:2
2. Pídele a Dios que te muestre cuánto ama tu adoración, para revelarte el gran amor que tiene por ti. Que su deseo de adoración sea la base de tu devoción.
“Pero se acerca la hora, y ha llegado ya, en que los verdaderos adoradores rendirán culto al Padre en espíritu y en verdad,[a] porque así quiere el Padre que sean los que le adoren”. Juan 4:23
“Y pido que, arraigados y cimentados en amor, puedan comprender, junto con todos los santos, cuán ancho y largo, alto y profundo es el amor de Cristo; en fin, que conozcan ese amor que sobrepasa nuestro conocimiento, para que sean llenos de la plenitud de Dios”. Efesios 3:17-19
“Cada uno de ellos tenía seis alas y estaba cubierto de ojos, por encima y por debajo de las alas. Y día y noche repetían sin cesar: ‘Santo, santo, santo es el Señor Dios Todopoderoso, el que era y que es y que ha de venir”. Apocalipsis 4:8
3. Dedica un tiempo a descansar en la presencia de Dios. Pídele que te revele su amor de una manera fresca y adóralo como respuesta.
“Para mí el bien es estar cerca de Dios”. Salmo 73:28
“Me has dado a conocer la senda de la vida; me llenarás de alegría en tu presencia, y de dicha eterna a tu derecha”. Salmo 16:11
“Porque el Señor tu Dios está en medio de ti como guerrero victorioso. Se deleitará en ti con gozo, te renovará con su amor, se alegrará por ti con cantos”. Sofonías 3:17
Si en cualquier momento del día sientes el peso del mundo sobre tus hombros, toma unos minutos para practicar la adoración. Un pequeño momento de adoración tiene el poder de volver a poner en orden las prioridades en nuestras vidas y hacer que las tensiones y las cargas de la vida disminuyan a la luz del amor eterno de Dios. Que tu día de hoy esté marcado por la paz y la alegría de quien conoce el amor y la cercanía del Padre.
Lectura Complementaria: Juan 4
Haga clic aquí para visitar la página de Primeros15